Todo lo que se necesita es un poco de creatividad y elegir las especies adecuadas.
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Tener un trozo de selva en un departamento, en un pequeño rincón de la terraza no es imposible. Los jardines verticales son la solución perfecta para quienes viven en espacios urbanos reducidos y no quieren renunciar al verde.
Existe una gran variedad de especies que se adaptan perfectamente a este tipo de cultivo, y todo lo que se necesita es un poco de creatividad y algunas estructuras que aprovechen el espacio vertical.

Lo primero que se necesita es algo que soporte el peso de las plantas. Pueden ser desde una pared de madera o metal, hasta estructuras tipo estanterías, jardineras colgantes o macetas recicladas.
Lo importante es que las plantas tengan espacio suficiente para crecer y no se sobrecargue el sistema
Usar una buena capa de sustrato, que drene bien el agua, es fundamental porque el exceso de humedad puede ser fatal para algunas especies. Y no hay que olvidar que el riego debe ser regular, pero sin excesos.
La pregunta es ¿qué especies son ideales para este tipo de jardinería vertical en espacios pequeños?
Una de las mejores opciones son las plantas trepadoras, como el Jazmín (Jasminum), que además de aportar un aroma delicioso, se adapta muy bien a la vida vertical.

Estas plantas pueden cubrir cercos, paredes o estructuras sin requerir grandes espacios.
Para un toque más tropical y colorido, las helechos siempre son una excelente elección. El Nephrolepis exaltata, o helecho común, se cultiva muy bien en jardines verticales.
Los jardines verticales llevan la vegetación a lugares inesperados, creando un ambiente más saludable y acogedor en espacios compactos
Esta especie, además de ser resistente y fácil de cuidar, tiene un crecimiento exuberante, ideal para llenar espacios pequeños con verde.

Otra opción interesante es el Cissus antarctica, también conocido como vid de interior, que se adapta a entornos con poca luz y es perfecto para crear cascadas verdes de hojas brillantes.
Si se busca algo que combine belleza con funcionalidad, el romero (Rosmarinus officinalis) es perfecto para un jardín vertical.
Los jardines verticales son la opción perfecta para quienes buscan llenar de vida sus espacios sin sacrificar metros cuadrados
Esta planta aromática es resistente a la sequía, crece muy bien en espacios reducidos y, además, regala sus hojas frescas que son deliciosas para agregar un toque aromático a los platos.

También se puede sumar lavanda (Lavandula angustifolia), que, además de ser resistente y fácil de cultivar, atrae polinizadores como abejas y mariposas, ayudando a crear un mini ecosistema urbano en tu propio hogar.
Por supuesto, no pueden faltar las suculentas. Son el hit para este tipo de jardines porque son de bajo mantenimiento, requieren poca agua y tienen una apariencia encantadora.
Algunas especies como Aloe vera o Echeveria, pueden dar un toque de color y textura única a la pared verde de tu minijardín. Su resistencia a las condiciones secas las hace perfectas para jardines verticales, incluso en climas más calurosos.